ADIOS MAESTRO, JOSE "PEPE" BENTÍN

JOSÉ BENTÍN DIEZ CANSECO

Lima, 1938-2015

Ayer viernes 02 de octubre de 2015 nos dejó José Bentín Diez Canseco, gran hombre, arquitecto y maestro de generaciones de profesionales que hoy lamentamos su partida.  “Pepe”, como le gustaba que le llamasen sus colegas y amigos, formó parte de una brillante generación de arquitectos, formados en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Ingeniería (FAUA-UNI), que han liderado el desarrollo de la profesión las últimas décadas, y han sabido combinar ese talento y maestría con la generosidad de la docencia.  Algunos de esos otrora estudiantes fueron Frederick Cooper, Eugenio Nicolini, Miguel Cruchaga, Franco Vella, Emilio Soyer, entre otros.  

Reunión en la calle Capón en Lima 1960: 1º Fila: F. Vella, F.Marcet, E.Chuy y J.Castro. 2ºFila: R.Quiñones, E.Nicolini, J.Bentín, M.Cruchaga, E.Sabat y A.Cerritelli. 3ºFila: E.Vigil, J.Alarco, F.Cooper y V.Velasco.

Machu Picchu desde la cumbre del Huayna Picchu - 1960. L.Takahashi, J.Bentín, F.Vella y J.Alarco.

Pepe fue además de un gran arquitecto, un apasionado investigador y escritor.  Nos ha dejado importantes investigaciones como la que desarrolló sobre el Arquitecto Enrique Seoane Ros (FAUA-UNI 1989), y otros libros, algunos autobiográficos como “Crónicas en la ruta de la arquitectura” (Lima, Perú 2014) gracias al cual podemos conocer un poco más de su vida y revivir los relatos que sabía contar entre bebidas espirituosas.  Pepe fue un hombre afortunado, al menos desde una mirada externa, luego de concluidos sus estudios en la FAUA-UNI, se especializó en urbanismo en el Architectural Association School of Architecture de Londres y en el Institute d’Urbanisme de París.  En 1966 obtuvo la beca de l’Academie d’Architecture de Francia para estudios de arquitectura en París, y en 1970 la beca del Ministerio de Asuntos Extranjeros de Francia para estudios de Organización y Diseño de Hospitales.  Innumerables son las historias producto de esa larga estancia europea, que compartió ocasionalmente con amigos y colegas.

Con peruanos en el CIVIS en Roma.

 
Ya de regreso en el Perú, se incorpora a su alma mater como docente en 1967, manteniendo esa condición hasta la fecha.  Asumió el Decanato en el período 1991-1993, en uno de los momentos más delicados de la Universidad (parcialmente tomada por grupos terroristas), y supo acompañar al arquitecto Javier Sota (quien había asumido el cargo de Rector) en la recuperación de la misma.  En esos años, yo había terminado el colegio y habiendo decidido estudiar arquitectura fui llevado por mi padre (que estudió arquitectura en la Villareal) a la FAUA para mostrarme la que para ellos era la Escuela de Escuelas.  Tuve la suerte de tener a Pepe como Decano en mi primer año de estudiante, y luego como Profesor en el Taller de Diseño 10.  

Con Javier Sota, en el Decanato de la FAUA-UNI - 1991

Volviendo a los sesenta, Pepe participa junto a sus amigos del concurso para el Centro Cívico de Lima quedando seleccionados para la segunda ronda y obteniendo el segundo premio.  Luego participan en el Concurso Internacional de Vivienda PREVI, en el que compiten con oficinas de arquitectura de todo el mundo como la de Aldo Van Eyck, James Stirling, Atelier 5, George Candilis, entre otros.  Pepe pudo aplicar los conocimientos adquiridos durante sus estudios de post-grado y su participación en el diseño de la New Town Cumbernauld (Escocia, 1964).  Con esa experiencia y gracias a la confianza de su maestro Javier Cayo (entonces Director General del Ministerio de Vivienda y Construcción), se le encarga el desarrollo de 12,000 viviendas en el distrito de Santiago de Surco en Lima, proyecto que llevaría el nombre de “Los Próceres” y del cual participarían diversos estudiantes y profesionales, entre los cuales figura el nombre de una joven estudiante de arquitectura quien luego sería mi madre.

  

Concurso PREVI.  Franco Vella, Raúl Quiñones, José Bentín, Guillermo Claux y Luis Takahashi

 

Proyecto Habitacional "Los Proceres"  (Foto 2013)

Pepe mantuvo plena actividad proyectual hasta antes de su partida, ha ganado y ha sido premiado en un sin-número de concursos, siendo el último el de la sede para la Asociación Cultural Peruano Británica en el distrito de La Molina en Lima (agosto 2015).  Ha desarrollado proyectos urbanos, de vivienda, educación, salud, equipamientos deportivos y culturales; habiendo destacado los últimos años la Remodelación del Estadio Nacional del Perú (2008-2010), el Instituto Nacional de Salud del Niño (San Borja, Lima. 2009-2010), y el Proyecto para la Restauración y Ampliación del Teatro Municipal de Lima (2000-2007); siendo este último un proyecto marcado por la polémica, como bien narra Pepe en su libro, desde la buena pro del concurso, hasta la ejecución de la obra que no respetó el proyecto presentado haciendo un burdo pastiche.  Coincidentemente el entonces alcalde es quien hoy ha convertido la recuperación paisajística del Río Rímac en el Centro Histórico por tres baipases en la Av. 28 de Julio.

 
Pepe te fuiste, pero sin haberte conocido demasiado, creo que te fuiste bien, como me gustaría irme también.  Estuviste profesional e intelectualmente activo hasta poco antes de entrar en cuidados intensivos, y tu cuerpo que supo acompañarte en tantas aventuras pudo despedirse con la dignidad de un grande.  Supiste continuar la escuela que te heredaron tus profesores, y transmitir a tus alumnos, colaboradores y socios tu pasión por la docencia y profesión.  Tuviste la generosidad de compartir tu prestigio y nombre, y hoy son tus amigos y herederos quienes mantendrán vivo tu recuerdo en cada sello de calidad que impongan a sus proyectos.

 
Yo, en lo personal, agradezco tu cariño demostrado desde que fui estudiante, hasta el último almuerzo que compartimos hace unos meses, tiempo en el cual me pediste que te llame “Pepe” en vez de “arquitecto”.  Agradezco los libros que me regalaste, con esa simpleza y generosidad que siempre te ha representado, y el gran abrazo por mi último cumpleaños.  Me queda la posta que nos dejas a los que fuimos privilegiados como tú de estudiar en nuestra alma mater, y el deber de ejercer la profesión con honestidad y coherencia, palabras algo descuidadas en nuestros días.

 
Hasta la próxima Pepe, te dejo un flamenco de esos que sé que disfrutabas, un homenaje a otro grande que se fue como tú para decorar nuestra constelación.  ¡Y Arriba Alianza!
 
Aldo Facho Dede

Fotos: Página de Faebook de José Bentín