Jose Antonio Coderch - Arquitecto
Barcelona, España 1951
Conocí a Coderch con este edificio, estaba por finalizar la carrera y un arquitecto amigo me lo "presentó" en un libro que no he podido conseguir. Me impactó por la complejidad de la planta que en una primera mirada se contrapone a la claridad de las fachadas. Lo re-dibujé varias veces e intenté llevarla a algunos proyectos particulares, pero no me fue posible, es única, es de su momento y contexto. Hoy se eliminarían tabiques y puertas, se agrandaría la cocina y baños sacrificando vestíbulos y circulaciones. Luego de largas reflexiones comprendí que el verdadero aporte de Coderch es el demostrarnos cómo llevar luz y mar a tanto ambiente como sea posible; controlar el potente sol mediterráneo en el verano y atraer sus rayos en el invierno. Cómo resolver una obra magistral de arquitectura y a su vez superar las expectativas comerciales del cliente.
Me apasiona la composición de sus frentes, el equilibrio entre los paños con parasoles y los recubiertos con cerámicas; la estudiada proporción del basamento, cuerpo y remate. Lo vigente del edificio, lo impecable de la solución de los detalles, la elegancia de la terminación de las fachadas en la marquesina. Me hace recordar que la Modernidad es mucho más amplia que lo que muchos pretenden encasillándola en volúmenes cuadrangulares, blancos y vidriados. La Modernidad es el saber hacer un proyecto auténtico, coherente con su tiempo y lugar. Aprovechar la tecnología disponible y explotar los materiales de la zona; buscar lo universal sin olvidar lo local, o dicho de otra forma, teñir de local formas que se deben a una comprensión universal del hombre.
Aldo Facho Dede
Notas:
Las fotos en b/n son obra de F. Catalá Roca y Coderch, publicadas en el libro "Coderch" de la editorial Gustavo Gili.
Las fotos a color son de mi autoría.
Barcelona, España 1951
Conocí a Coderch con este edificio, estaba por finalizar la carrera y un arquitecto amigo me lo "presentó" en un libro que no he podido conseguir. Me impactó por la complejidad de la planta que en una primera mirada se contrapone a la claridad de las fachadas. Lo re-dibujé varias veces e intenté llevarla a algunos proyectos particulares, pero no me fue posible, es única, es de su momento y contexto. Hoy se eliminarían tabiques y puertas, se agrandaría la cocina y baños sacrificando vestíbulos y circulaciones. Luego de largas reflexiones comprendí que el verdadero aporte de Coderch es el demostrarnos cómo llevar luz y mar a tanto ambiente como sea posible; controlar el potente sol mediterráneo en el verano y atraer sus rayos en el invierno. Cómo resolver una obra magistral de arquitectura y a su vez superar las expectativas comerciales del cliente.
Me apasiona la composición de sus frentes, el equilibrio entre los paños con parasoles y los recubiertos con cerámicas; la estudiada proporción del basamento, cuerpo y remate. Lo vigente del edificio, lo impecable de la solución de los detalles, la elegancia de la terminación de las fachadas en la marquesina. Me hace recordar que la Modernidad es mucho más amplia que lo que muchos pretenden encasillándola en volúmenes cuadrangulares, blancos y vidriados. La Modernidad es el saber hacer un proyecto auténtico, coherente con su tiempo y lugar. Aprovechar la tecnología disponible y explotar los materiales de la zona; buscar lo universal sin olvidar lo local, o dicho de otra forma, teñir de local formas que se deben a una comprensión universal del hombre.
Aldo Facho Dede
Notas:
Las fotos en b/n son obra de F. Catalá Roca y Coderch, publicadas en el libro "Coderch" de la editorial Gustavo Gili.
Las fotos a color son de mi autoría.
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